El coaching ha ido ganando popularidad a medida que más personas, y también empresas, exigen sus beneficios. Proporcionando una increíble capacitación sobre nosotros mismos, y a fin de explotar nuestras habilidades, el coaching realza nuestro crecimiento personal. Y, por ello, un máster en coaching como el ofrecido por Ola Coach, más que una formación, es un estilo de vida.
Incrementar el desarrollo personal
A menudo, el nacimiento de muchas de nuestras capacidades y aptitudes subyace en nuestro interior bajo una pesada capa de tierra que requieren de un buen impulso
para florecer. Aunque seamos capaces de intuirlo, de percibir algo de aquella magia que nos configura como humanos y, más aún, nos confiere identidad, es preciso saber
cómo guiarse y guiar en ese camino de autodescubrimiento e introspección. No tan sólo porque de ello puede nacer toda una revolución vital, sino porque también es útil
para poder aconsejar a los demás y acompañarlos por el insólito camino que es vivir.
Justamente en esa línea es donde se sitúa la disciplina del coaching, una vía para aprender a gestionar nuestros recursos y capacidades personales que se sirve de un entrenador, o coach, que sabe hacernos explotar tal inmensidad. Concretamente, en el ámbito formativo, existen master coaching, como los ofrecidos por Ola Coach, que mediante 52 clases online con tutor, sesiones supervisadas, mentorías grupales, individuales, prácticas y vídeos consiguen explotar esa región interna de nuestra mente. Además, distribuyendo dicho recorrido personal en 12 meses, intercalando ejercicios prácticos, coloquios y lecturas para el crecimiento interior. Toda una hazaña.
El poder del coaching
Más allá de cuanto puede esperarse de un curso teórico, el coaching nos proporciona todo aquello que necesitamos para desarrollarnos personalmente. Además, el coaching, gracias al poder y la confianza en uno mismo que consigue transmitir, es capaz de concedernos el don del liderazgo. Lo que no sólo se traduce en un mejor control y una impoluta gestión de nuestro día a día, sino que repercute positivamente incluso en nuestra carrera profesional y nuestras relaciones intrapersonales e interpersonales. En ese sentido, el coaching también toma como fundamento el respeto tanto por uno mismo como por el resto. Aprendiendo de todo cuanto tenemos por ofrecer y, con ello, sabiendo todo cuanto pueden ofrecer los otros.
Asimismo, el coaching se ha convertido en una de las profesiones más demandadas, ya que, mediante másteres en coaching como los ofrecidos por Ola Coach, se pueden obtener unas grandes salidas profesionales. Asegurando un incremento de al meno un 88% de nuestro rendimiento, muchas empresas destinan hasta un 57% de su presupuesto en dicha disciplina. Como bien reseña la plataforma web de Ola Coach, con datos proporcionados por la International Coach Federation (IFC), siete de cada diez directivos exigen dicha formación y profesionales del sector en España. Y no es de extrañar, dado que el coaching se abre en distintas ramificaciones.
Modalidades de coaching
La modalidad de coaching más conocida es, posiblemente, la deportiva. Ello consiste en un grupo de especialistas que se dedican a entrenar y a formar en el desarrollo personal a muchos de los mejores atletas del mundo. El rendimiento físico no sólo se consigue mediante una buena forma física. De hecho, la mente interfiere de un modo asombroso en la noción y superación de nuestros propios límites. Razón por la que esta modalidad del coaching se ha establecido largo tiempo, y va para más, en los deportes de élite. Contando con individuos capaces de enfrentarse a todo gracias a ese pequeño gran impulso que un entrenador personal puede inducir al atleta.
En otra franja encontramos el coaching personal, cuyo objetivo es el de ayudarnos a gestionar la vida para hallar armonía y bienestar. En este ámbito, uno de los objetivos es localizar nuestras flaquezas con el propósito de fortalecerlas y mejorar nuestras aptitudes ante todo cuanto se acontezca. Y en una línea distinta y más centrada en el entorno empresarial, el coach profesional se ha popularizado entre los dirigentes de empresas que necesitan ganar en liderazgo para dirigir atinadamente sus negocios. Añadiendo, además, que ante un sector cada vez más competitivo, la rapidez y el atino en la toma de decisiones es primordial para la salud de cualquier empresa y, evidentemente, nuestra propia salud.
Más que un curso, un estilo de vida
Aunque podamos creer que todo está bajo control, la realidad es que son muchos los factores que pueden influir en la desestabilización de nuestro día a día. El estrés laboral, la carga de las responsabilidades y el desconocimiento sobre nosotros mismos puede convertirse en un gran lastre para lograr nuestros objetivos. El coaching, no obstante, aborda dichos estadios y consigue extraer de nuestro interior la fuerza necesaria para combatirlos mediante algo sorprendentemente sencillo: nosotros mismos.
Basta con saber que somos capaces de superar la jornada laboral, de enfrentarnos a todo reto y de poder liderar un proyecto personal o profesional, como para hacerlo realidad. El coaching es, por tanto, y más que un curso o una formación en sí, un estilo y sistema de vida. Una oportunidad para dejar de reducirnos a un sujeto constantemente condicionado por su entorno a fin de convertirnos en catalizador y parte activa de todo cambio que se acontezca sobre nosotros. Porque nada es imposible si, a partir de un buen guía, nos convertimos en faros de nosotros mismos.